En mi memoria tengo grabado el día que les dejé a mis 3 hijos en la puerta de la institución por primera vez llenos de emociones, curiosidades, nerviosismo y alegría; el tiempo ha pasado y mis hijos ya no son aquellos chiquillos que comenzaron, han madurado, han aprendiendo cosas extraordinarias y han crecido emocional, física, espiritual y personalmente.

Cada uno ha cumplido su objetivo y por eso es un buen momento para mostrar mi  agradecimiento a los que les han acompañado, guiado y dirigido en este camino.

La gratitud es la memoria del corazón y desde el corazón les doy las gracias a Ustedes cuerpo de docentes del Inedmi, por haberse ocupado de instruirles, por regañarles y ser duros cuando no hicieron las cosas bien, por limpiar sus lágrimas, cuidarles y aconsejarles, por motivarles a salir adelante, por inculcarles el hábito del estudio, por transmitirles con firmeza y con cariño tantos valores conocimientos.

Hoy en el 2021 cuando atravesamos por un difícil momento como es la pandemia soy fiel testigo de todo su esfuerzo por lograr satisfacer las necesidades de todos los estudiantes a través de los avances, nuevas herramientas y el cambio de la infraestructura; mil gracias por todo su apoyo y colaboración los enseñaron no solo a pensar en grande sino a ser grandes Dios le bendiga familia Inedmi.